Pocos sitios existen en Jaén que se dediquen casi de forma exclusiva a la hostelería dedicada al mundo del pescado. Y este es uno de ellos. Conocí este lugar porque un día cualquiera entré allí a desayunar y ya se ha convertido en mi centro de pre-almuerzo matutino. Últimamente anda de capa caída por culpa del asedio de las obras, las cuales están destrozando el comercio de la zona baja del Paseo de la Estación. Sin embargo, sigue resistiendo las acometidas del Tranvía con una terraza amplia.
A pesar de que alguna vez he pedido raciones (práctica cada vez menos usual para mi), doy fe de que sólo con las tapas se puede comer. Al contrario de otros bares, "Los Pescaitos" no sigue un patrón de aperitivos. El universo del pescado es bastante diferente al de la carne, por lo que las tapas irán en función de los frutos del mar de que dispongan. Además, también sirven carne con tomate, patatas ali-olí, jamón recién cortado y productos habituales en cualquier establecimiento de la capital.
Respecto al precio, hay que decir que se encuadra justo en el ecuador entre caro y barato. Se puede solicitar medias raciones, lo cual permite degustar varios platos a un precio razonable. El local es amplio, aunque yo recomiendo situarse en la parte final de la barra, justo al lado de uno de los grifos y de la salida de la cocina. No obstante, el servicio es bastante rápido. Varios años de vida avalan este establecimiento llevado en volandas por gente joven y servicial.
A pesar de que alguna vez he pedido raciones (práctica cada vez menos usual para mi), doy fe de que sólo con las tapas se puede comer. Al contrario de otros bares, "Los Pescaitos" no sigue un patrón de aperitivos. El universo del pescado es bastante diferente al de la carne, por lo que las tapas irán en función de los frutos del mar de que dispongan. Además, también sirven carne con tomate, patatas ali-olí, jamón recién cortado y productos habituales en cualquier establecimiento de la capital.
Respecto al precio, hay que decir que se encuadra justo en el ecuador entre caro y barato. Se puede solicitar medias raciones, lo cual permite degustar varios platos a un precio razonable. El local es amplio, aunque yo recomiendo situarse en la parte final de la barra, justo al lado de uno de los grifos y de la salida de la cocina. No obstante, el servicio es bastante rápido. Varios años de vida avalan este establecimiento llevado en volandas por gente joven y servicial.
5 comentarios:
Me alegro que existan bares a los que aún se pueda ir. Ultimamente los que abren son bares de paripé, como yo digo, mucho nombre pero poca chicha.
Esta el Paseo de la Estación para no pasar por las obras, pero visitaré el que nos recomiendass.
Terraza amplia, dices?
Menos mal que han dejado medio metro para pasar...
Dónde está este bar?. Cuál es su dirección. Gracias
Paseo de la Estación, 50 más o menos. No sé si es dos números antes o después, pero vamos, que es por ahí. Cerca del Banco de España.
No está mal pero es cierto que a mi el tema de estar rodeado de polvo de las obras no me anima mucho a bajar por allí. Que la bruja se pase por allí y le pegue un repaso con su escoba.
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